Por Daniela Saavedra

La información es de Camila Suazo

Con una emotiva Eucaristía, el Instituto de Humanidades Alfredo Silva Santiago celebró el «hito de la Solidaridad». El encuentro tuvo como enfoque principal la reflexión sobre el valor del servicio al prójimo, inspirado en el legado de San Alberto Hurtado.

Durante la ceremonia que se enmarca en el mes de la solidaridad, los estudiantes de primer año de enseñanza media recibieron una “piocha” como símbolo representativo de la vida y obra de San Alberto Hurtado, conocido por su compromiso con las ayudas sociales.

El mensaje del santo «amar a Dios y amar al prójimo«, resonó a través de las palabras de la coordinadora de pastoral del ciclo menor, Ximena Sáez, quien destacó que este hito “significa un paso más en este itinerario pastoral de muchos chiquillos que llegaron en prekínder y a medida del tiempo van creciendo en comunidad. Implica entender que la solidaridad está en el otro, y que pueden hacerlo siempre, marca un alto y esperamos que también un antes y un después”.

Por otro lado, el profesor jefe del primer año medio A, Ariel Araneda, comentó la relevancia del evento y señaló que “es un hito dentro de la formación de nuestros estudiantes, porque es hacerlos conscientes sobre un valor de nuestro colegio, que se desarrolla y se transforma en un sello institutano”.

La Santa Misa fue presidida por el Párroco de las parroquias Sagrados Corazones de Jesús y de María y Nuestra Señora de Guadalupe y asesor de la Vicaría Pastoral Social, Pedro Gómez, quien espera que este símbolo sea una motivación de los estudiantes para emprender obras similares de solidaridad.

Además, también añadió que este mes, en consonancia con la celebración, se llevaron a cabo diversos actos en la diócesis, incluyendo el Espacio Misericordia, donde se brinda acogida y alimento a personas en situación de calle. La participación activa de los colegios en estas actividades subraya el compromiso con la solidaridad más allá del mes conmemorativo.

El hito de la Solidaridad es un signo de los colegios bajo el sello católico, donde además, representa los valores que rigen la educación de los establecimientos que pertenecen a las Fundaciones Educacionales, quienes en su proyecto educativo enseñan bajo los valores de “Educar, Evangelizar y Servir”, con el objetivo de propiciar el encuentro con Jesús y fomentar la educación integral de los estudiantes para que crezcan en sabiduría y gracia.